La ciencia demuestra que los «judíos» del mundo no son la semilla de Abraham, sino la «sinagoga de Satanás»
«Conozco la blasfemia de los que dicen ser judíos, y no lo son, sino que son la sinagoga de Satanás» – Revelaciones 2:9
Una vez más, la Palabra de Dios demuestra ser correcta y la humanidad en todas partes está confundida. Muchos cristianos creían que las personas que hoy día se declaran judíos, descendientes de Abraham, eran exactamente lo que decían. Ellos insistieron en que sus antepasados, sus padres fundadores, les habían dado título sobre la tierra de Israel según el Antiguo Pacto de hace más de 5.000 años y muchos creyeron en ellos.
No debieron haberles creído.
Por Texe Marrs
Los cristianos deberían haber leído sus Biblias y haber creído lo que Dios dice. El apóstol Pablo nos advirtió que debemos tener cuidado con la «locura de las genealogías». Él nos dijo que no escucháramos «fábulas judías». Incluso dejó claro que la Antigua Alianza había sido reemplazada por la Nueva Alianza, que era Jesús mismo. Afirmó que «aquí no tenemos ciudad permanente», que era la Jerusalén celestial a la que los profetas y los santos miraban. Sí, esa fue la Promesa que Dios hizo a Abraham y a nosotros.
En cuanto a aquellos que dicen ser «judíos», que insisten en que ellos y su raza son los únicos «Elegidos por Dios» y tienen la Promesa, Jesús no escatimó palabras. Él dijo, dos veces en Apocalipsis, que éstos no eran Su pueblo. Ellos son mentirosos, «blasfemos», dijo nuestro Señor y Salvador:
«Yo sé…la blasfemia de los que se dicen ser Judíos, y no lo son, mas son sinagoga de Satanás» – Revelaciones 2:9
“He aquí, yo doy de la sinagoga de Satanás, los que se dicen ser Judíos, y no lo son, mas mienten; he aquí, yo los constreñiré á que vengan y adoren delante de tus pies, y sepan que yo te he amado» – Revelaciones 3:9
¿Ustedes, creen lo que Jesucristo dijo? ¿Crees en la Palabra de Dios? ¿Tienes la Promesa dada solamente a los de la Fe? ¿Eres de Cristo? Entonces, dice la Escritura, sin importar su raza, « nosotros como Isaac somos hijos de la promesa” – Gálatas 4:28-29
Esta es la indiscutible Palabra de Dios, y ahora la ciencia -la Ciencia del ADN- ha confirmado su asombrosa verdad. La ciencia del ADN, la matemática de Dios, ha confirmado que Jesús estaba absolutamente diciéndonos la verdad: «… los que dicen ser judíos» no son judíos sino la sinagoga de Satanás.
Este hecho -que la moderna ciencia del ADN demuestra que la Palabra de Dios es correcta- es el tema del sorprendente libro, «DNA Science and the Jewish Bloodline». Este es un libro que debes tener. Demuestra absolutamente que las personas que se identifican hoy como «judíos» no son judíos.
La evidencia innegable de esto se ha hecho clara con el advenimiento de la investigación del ADN. En 2001, la Dra. Ariella Oppenheim y su equipo de la Universidad de Tel Aviv publicaron su estudio que encontró que los «judíos» eran principalmente Jázaros, de Jazaria, un país del Cáucaso que ahora se llama Kazajstán, Georgia y otros nombres. Los Jázaros se convirtieron de las religiones paganas al judaísmo talmúdico después del 8vo siglo, pero por supuesto, racialmente siguen siendo jázaros.
Los Jázaros eran y son un genoma que es principalmente sangre turca y mongola.
Así, hoy, cuando ves a un «Judío», lo que realmente encuentras es genéticamente a un jázaro que practica el Judaísmo. El jázaro no tiene sangre israelita. Sus antepasados no son los israelitas de la Biblia de la dispersión del territorio de Palestina en los tiempos del Imperio Romano que luego pasaron a poblar Egipto, el norte de África y los territorios del Imperio Romano, que luego, con la conquista de los musulmanes de Europa, pasaron a asentarse en España y con la reconquista de España fueron expulsados y emigraron al Imperio Otomano, a Marruecos, a Holanda y al Nuevo Mundo (el continente americano), estos son los verdaderos judíos genéticos, aparte de un estudio más a fondo para dar seguimiento al tema de las 12 tribus de Israel en el mundo. Más este pueblo pagano jázaro convertido al judaísmo y sumido en el dilema si ser un pueblo dominado por la Roma cristiana o por el Imperio Musulman árabe, se decantaron por el judaísmo a fin de permanecer neutrales en medio de la ruta que dividía a los imperios romano y musulman en pugna por aquellos días. Los jázaros no adoraban al Dios, Jehová, era un pueblo pagano que lo que tenían eran literalmente un culto fálico. Los jázaros nunca estuvieron en la tierra de Israel, ya que eran un pueblo de sangre turco-mongola del cáucaso. No son para nada la simiente bíblica de Abraham. No tienen ninguna promesa de Dios. Ahora finalmente lo sabemos como un hecho científico absoluto.
Estos judíos jázaros, no son entonces los judíos la diáspora de la Europa occidental durante ocaso del Imperio Romano e inicio de la Edad Media, estos más bien son los descendientes del otrora pueblo pagano convertido al judaísmo y que emigraron a la Europa oriental asentándose en lo que hoy son los países de Polonia, Ucrania, Georgia, Bulgaria, Hungría al término del poco conocido imperio/estado jázaro.
A finales de 2012, otro científico nacido en Israel, Dr. Eran Elhaik, del Instituto McKusick-Nathans de Ciencias Genéticas del Johns Hopkins Medical University, publicó su investigación en The Journal of Biology and Evolution. Considerado por los genetistas de todo el mundo como el «estudio definitivo» y aprobado por pares, esta investigación autorizada confirmó los resultados anteriores del Dr. Oppenheim y fue aún más lejos.
«No hay sangre o conexiones familiares entre los judíos», informó el Dr. Elhaik. «Los diversos grupos de judíos en el mundo actual no comparten un origen genético común. Su genoma es en gran parte jázaro.»
«Cualquier sangre israelita de los judíos jázaros», añadió el Dr. Elhaik, «está presente en una proporción minúscula».
Al igual que el doctor Oppenheim, la investigación de Elhaik relacionó a los judíos de hoy con los clanes turcos de Jazaria, en el Cáucaso ruso.
Los hechos son: Israel y Estados Unidos, después de la I y II Guerra Mundiales, están poblados por personas que dicen que son judíos cuando no son judíos. Son jázaros de origen turco-mongol. Cuando el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirma: «Dios dio esta tierra a nuestros antepasados israelitas», no está diciendo la verdad. Cuando los judíos jázaros de hoy dicen que poseen la tierra de Israel como un derecho divino, están tristemente equivocados.
De hecho, Elhaik y Oppenheim encontraron que el sufrido pueblo palestino que vive un estado permanente de «apartheid» podría tener más sangre israelita corriendo por sus venas que las personas que dicen ser judíos. Una prueba de ADN, sin duda, confirmaría este hecho llamativo.
Los cristianos evangélicos y otros fundamentalistas cristianos que los defienden equivocadamente, han sido engañados. Si hubieran leído y creído a Jesucristo, Él les dijo lo que debían buscar en Apocalipsis 2:9 y 3:9. Dijo que los que dicen ser judíos no son judíos, sino que son «blasfemos» y de la «Sinagoga de Satanás».
Los jázaros, lo sentimos mucho, pero no son genéticamente judíos de verdad, aunque practiquen el judaísmo. Estos «judíos» insisten que su Talmud babilónico, entre otros libros, son mayores que la Torá y la Santa Biblia. Estos textos atroces señalan a Jesús como un mago, un mentiroso y un bastardo ardiendo en el infierno hoy. Estos textos exhortan a los judíos a «matar al mejor de los cristianos» que, según se afirma, son idólatras.
¿No es esto «blasfemia»? ¿Esto no prueba que la Biblia nos está diciendo a ti y a mí, la Verdad absoluta? Los jázaros que luego pasaron a fundar el movimiento Sionista desprecian y persiguen a los cristianos – hoy en día utilizando a los musulmanes radicales de DAESH/ISIS para acabar con ellos en Siria e Irak, estos sionistas jázaros son los instigadores de la Primera y Segunda Guerra Mundial donde persiguieron entre muchos objetivos, deshacerse de los verdaderos judíos que les estorbaban, es decir, aquellos que no simpatizaban con las ideas radicales y fundamentalistas del movimiento sionista, así pues, la «solución judía» fue eliminar a los judíos de la Europa Occidental o en fin, de todos aquellos judíos tradicionales obedientes a las leyes de Dios, los que se podrían identificar como ortodoxos, jasídicos, misrajíes, sefarditas, etc. Estos instigadores de tanto mal hasta el día de hoy son, de hecho, la sinagoga de Satanás, quienes no tienen como lo demuestra el ADN nada de judío, solamente el haberse convertido del paganismo al judaísmo mientras fueron el pueblo jázaro en el Cáucaso.
En el nuevo libro, «DNA Science y Jewish Bloodline», se examina completamente a los Jázaros, incluyendo la historia de cómo se convirtieron al judaísmo, y se provee todas las evidencias sobre los estudios de ADN. En este libro, cita no sólo al Dr. Elhaik y al Dr. Oppenheim, sino también a otros investigadores famosos de la genética.
También se presenta los escritos e investigaciones del historiador israelí y judío jázaro, Arthur Koestler, cuyo libro «La Decimotercera Tribu de Israel» es un clásico y Shlomo Sand, profesor de historia en la Universidad de Tel Aviv, cuyo reciente libro académico, «La invención del Pueblo Judío«, fue un bestseller del New York Times.
Incluso leerás lo que el Dr. Benjamin Freedman escribió sobre los jázaros y los judíos en la década de 1950, en su conocido tratado, «Facts are Facts».
Es un hecho indiscutible que los más grandes matemáticos y científicos del mundo no pueden negar. Es la respuesta a todo cristiano que, leyendo las páginas de «DNA Science and Bloodline», pregunta: «Si los jázaros son judíos, ¿hay realmente judíos en el mundo hoy?».
La Biblia dice que si perteneces a Jesús, tu raza u origen étnico no tiene ninguna importancia. Naciste de nuevo. Eres una nueva persona en Cristo, es decir, haciendo tuyo su sendero de liberación, con voluntad, disciplina y alegría.
Ahora conocemos que la Biblia sabe lo que dice. Ahora todo cambia.