Como si todo esto no fuese bastante, Trotsky también asesinó al más grande poeta de Rusia, Sergei Yesenin. La causa oficial de muerte: suicidio. A pesar del hecho que su cabeza había sido aplastada de tal forma que su cerebro colgaba afuera, Aún así, Yesenin todavía pudo colgarse, según el certificado de muerte del profesor judío Alejandro Gilyarevsky.
La razón principal para el asesinato fue el nuevo poema de Yesenin, «Tierra de Torcidos» en el que sorprendentemente describe a un tirano judío -Leibman Chekistov .
Todos sus amigos reconocieron a Leiba Bronstein-Trotsky por la descripción. Yesenin dio la bienvenida la «revolución» al principio pero pronto se desilusionó de ella y logró percibir las oscuras fuerzas trabajando detrás del espectáculo político.
Esa fue la razón por la que escribió su revelador poema, en que describe cómo hombres de negocios norteamericanos tomaron el poder en Rusia con la ayuda de gángsteres políticos que se transformaron en prospectores soviéticos que especulaban en el Marxismo.
Llamó a los traficantes del poder, ‘Parásitos‘ y que en realidad la república soviética era un engaño (esta palabra fue romanizada!). También describió el odio ardiente de Trotsky por la cultura rusa.
Sergei Yesenin había declamado pasajes de este poema a muchos de sus amigos.
Trotsky estaba informado sobre el contenido del poema y fue incapaz de perdonar esto.
El amigo de Yesenin, Alexei Ganin, que también era un poeta, fue arrestado en marzo de 1925. Acusado de difamación del camarada León Trotsky, fue sentenciado a muerte y ejecutado. Él había junto con los otros conocidos poetas Peter Oreshin, Sergei Klychkov y Yesenin, proclamado oficialmente que en Rusia exclusivamente los judíos tenían el poder. Estos cuatro habían hablado ruidosamente de las injusticias de los judíos comunistas contra Rusia en un bar, a finales de 1923, según un informe policial secreto.
Disponer de Yesenin no era tan fácil, sin embargo. Ya era mundialmente famoso.
Había pasado en los años 1922 – 1923 en varios países europeos y en los Estados Unidos, junto con su esposa norteamericana, Isadora Duncan que era bailarina de ballet.
Ya el 20 de febrero de 1924 de febrero, el Juez Kommissarov en Moscú había decidido arrestar a Yesenin por declaraciones anti-semitas. Yesenin supo de esto y se ocultó.
A comienzos de septiembre de 1924, Yesenin vivía clandestino en Baku cuando el hombre del GPU, Yakov Blumkin, ingresó de pronto al hotel de Yesenin y lo amenazó con un revólver y le describió lo que le esperaba en el sótano del GPU en Moscú. Yesenin escapó a Tiflis (Tbilisi) en Georgia dónde adquirió un revólver con el que retornó a Baku.
El 6 de septiembre de 1925, Yesenin tomó un tren de regreso a Moscú junto con Sofia Tolstaya. Dos judíos – A. Rog y Levit – de pronto se volvieron y provocaron a Yesenin por hacer declaraciones críticas hacia los judíos. Levit y Rog detuvieron a Yesenin en la estación de Kursk y lo entregaron a la milicia. El Juez Lipkin exigió su arresto. Pero él fue soltado, tal como había sido en Moscú el 23 de marzo de 1924, cuando los agentes secretos del GPU, los judíos hermanos M. e I. Neiman querían acusarlo de antisemitismo (conforme a los párrafos 172 y 176 del código criminal).
El GPU había reunido una gran cantidad de denuncias describiendo las declaraciones antisemitas hechas por Yesenin que era bien consciente de la situación real en la Rusia de entonces.
Este juicio probablemente habría atraído demasiada atención y los nombres de varios agentes secretos infiltrados en el círculo de Yesenin también habrían sido revelados. Eso fue porque ellos decidieron en varias ocasiones no llevarlo a juicio, a pesar del hecho que las acusaciones de antisemitismo (es decir contrarrevolución) ya se había lanzado contra él.
Así que Trotsky decidió disponer de Yesenin de otra manera. Yesenin se mudó de Moscú a Leningrado en la tarde del 23 de diciembre de 1925. Quería encontrar allí un buen lugar para vivir, editar sus poemas en dos volúmenes y comenzar a publicar su propia revista. Él pensaba quedarse al principio en el hotel Angleterre.
El asesinato de Yesenin se transformó en una misión especial para el GPU que antes había secuestrado a oponentes del régimen soviético, incluso en el extranjero, que fueron luego llevados a Moscú y ejecutados allí.
Un grupo de asesinos dirigidos por Yakov Blumkin llegó al hotel de Yesenin en la noche antes del 28 de diciembre de 1925 y e irrumpieron en su habitación. Su secuaz era Wolf Erlich quien más tarde fue encargado de llevar la falsa investigación en la muerte de Yesenin.
El poeta Se resistió, sorprendentemente bastante. Sus vecinos escucharon esto.
Luego los asesinos dieron de puntapiés a Yesenin y le hirieron gravemente en su cabeza con un objeto antes de que colgaran al gran poeta. Así fue como murió el valiente Sergei Yesenin.
El asesino de Yesenin, Yakov Blumkin, empezó su carrera como rabino en la sinagoga en Odessa.
Como muchos otros judíos extremista ortodoxos, buscó una posición en la Cheka después que los bolcheviques entraron en el poder. Al mismo tiempo era miembro oficial del Partido Social Revolucionario Social.
Trotsky le dio la misión de asesinar al embajador alemán Count Wilhelm von Mirbach, el 6 de julio de 1918, para prevenir el acuerdo de paz Brest-Litovsk. Los Social Revolucionarios fueron acusados de este asesinato. También el comunista Aino Kuusinen relató en sus memoria que Yacob Blumkin asesinó al embajador von Mirbach.
Después del asesinato del Embajador von Mirbach, Blumkin fue designado a la Cheka en Kiev en abril de 1919. En el verano de 1920 se volvió a Moscú dónde estudió en la academia militar. Blumkin fue nombrado Inspector Militar de Caucasia dónde posteriormente comandó el aplastamiento de una rebelión anti-soviética en Georgia en el verano de 1924. Blumkin se hizo tristemente famoso.
Le enviaron después a Mongolia dónde fue de hecho el jefe de la policía política.
Comenzó a asesinar a las personas allí con tal avidez demente, que la dirección del GPU en Moscú tuvo que volverlo a llamar, según la información de las memorias de Boris Bazhanov.
Ayudó después a Trotsky a escribir el libro de propaganda «Cómo se armó la Revolución». En 1925, Trotsky le dio la misión para seguir al poeta Yesenin hasta su muerte. Todos esto ha sido revelado ahora en la prensa rusa.
El Periodista Georgi Ustinov y su esposa Yelizaveta que también se hospedaban en el hotel fueron los primeros en entrar en la habitación de Yesenin en la mañana del 28 de diciembre. Los asesinos habían buscado en los papeles de Yesenin y en otras pertenencias. Estaban buscando probablemente el manuscrito de «Tierra de Torcidos». (Molodaya Gvardiya, No. 19, 1990.) Wolf Erlich entró también poco después.
Ustinov comprendió lo que realmente había pasado y prometió decir la verdad completa sobre el asesinato del poeta. Al día siguiente Georgi Ustinov y su esposa fueron encontrados colgados en su habitación. Se pudo certificar que se había usado violencia contra ellos antes de sus muertes.
El 29 de diciembre de 1925, la prensa de la tarde anunció que el poeta Yesenin de 30 años se había quitado la vida.
Yakov Blumkin fue enviado finalmente al Medio Oriente como espía-jefe del soviet.
Reclutó a agentes en Siria, Palestina y Egipto. Usaba un pasaporte con el nombre de Sultán-Zade. Los jefes de Blumkin eran entonces Vyacheslav Menzhinsky y Mikhail (Meier) Trilisser. Los días de verdugo de Yakov Blumkin también acabaron con la ayuda de verdugos. Stalin lo hizo ejecutar el 3 de noviembre de 1929 por su reunión con Trotsky en Constantinopla en el verano de 1929. Antes que Blumkin muriera, gritó: «¡Larga vida a Trotsky!» Yuri Felshtinsky, «El Derrumbe de la Revolución Mundial», Londres, 1991, Pág. 617-618.)